El Ministerio de Economía ha aprobado una nueva ley que ya está publicada en el BOE y que se pondrá en marcha a partir de febrero de 2016, sobre información y clasificación de los distintos productos financieros. La finalidad es que los inversores particulares de un vistazo puedan conocer el riesgo que asumen a la hora de adquirir estos productos.
Los productos son clasificados por colores en una escala del 1 al 6 y por colores del verde al rojo. Conoceremos el nivel de riesgo de cada producto antes de comprarlo. Aspectos importantes que se han tenido en cuenta a la hora de realizar la clasificación son: si se garantiza el capital invertido, el plazo en el que será devuelto o la calidad crediticia de la entidad.
- Categoría 1 color verde oscuro: productos de menor riesgo. Depósitos bancarios y seguros de ahorro.
- Categoría 2 color verde claro: productos con el 100% del capital garantizado y un plazo inferior a tres años, con una clasificación crediticia BBB+ o superior.
- Categoría 3 color amarillo claro: activos con un compromiso de devolución del 100%, un plazo de entre tres y cinco años y un rating entre BBB- o BBB.
- Categoría 4 color amarillo oscuro: emisiones de entre cinco y 10 años de plazo y un rating BBB- o BBB.
- Categoría 5 color naranja: emisiones de más de 10 años o las que garantizan solo un 90% del capital.
- Categoría 6 color rojo: resto de productos incluidas las acciones.
Las entidades bancarias a su vez podrán señalar de manera especial aquellos productos más complejos y que puedan tener más riesgos acompañando el color y nivel de escala de uno o dos candados. Si el producto es difícil de entender irá acompañado de una o dos exclamaciones.
Esta nueva medida afecta a la banca, aseguradoras y empresas de servicios de inversión.
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