Es posible que en algún momento necesitemos una suma de dinero considerable y que en lugar de acudir a un préstamo pensemos en ampliar el importe de la hipoteca que ya tenemos o bien rehipotecarnos. Os contamos las diferencias, ventajas e inconvenientes de estas dos opciones.
Rehipotecarnos
Nosotros nos rehipotecamos cuando decidimos aumentar el importe de nuestra hipoteca o cuando cambiamos alguna de las condiciones ya fijadas, pero para poder llevar a cabo este proceso tendremos que en primer lugar cancelar la hipoteca actual y después constituir una nueva hipoteca con las nuevas condiciones..
Los gastos que tendremos que asumir por una rehipoteca serán:
- Comisión por cancelación (suele ser aproximadamente el 1%).
- Gastos de registro y gestoría, tanto para cancelar como para abrir la nueva hipoteca.
- Gastos de notaría, tanto para cancelar como para abrir la nueva hipoteca.
- Gastos de tasación de la vivienda.
- Cuota variable de AJD (Actos Jurídicos Documentados).
Ampliación de la hipoteca
La ampliación de nuestra hipoteca sucede cuando necesitamos aumentar el plazo, capital o ambos factores. No necesitaremos cancelar y crear una nueva hipoteca, simplemente ampliar la hipoteca que tenemos actualmente. Este proceso se denomina «novación», y es bastante más sencillo que el de rehipotecarnos.
Los gastos que tendremos que asumir por ampliar la hipoteca son:
- Comisión por novación (suele ser aproximadamente del 1%).
- Gastos de registro y gestoría.
- Gastos de notaría.
- Gastos de nueva tasación
- Impuesto de Actos Jurídicos (el 1,5% del importe añadido a la hipoteca).
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