Una de las posibilidades que ofrecen las tarjetas de crédito, en estos momentos, es vincularlas a las virtuales. Se trataría de un escenario para mantener un segundo plástico en situaciones especiales, para preservar los gastos de cada día. Su diseño es muy apropiado en los viajes al extranjero, ante posibles extravíos, incluso robo de la tarjeta principal. La aceptación de este servicio complementario, por otra parte, no supondrá ningún gasto adicional para los titulares de este medio pago, ni en comisiones, o en gastos de gestión.
Solamente algunos modelos de tarjetas de crédito aceptan este modalidad, y siempre como complemento a la tarjeta, aceptando libremente este servicio. Pueden cargarse con el importe que crean oportuno los usuarios bancarios, para poderla utilizar bajo este saldo, y hasta agotarlo. Pero lo realmente beneficioso para ellos, es que en ningún momento, tendrán que declarar el número de su tarjeta principal, y sus operaciones se mantendrán bajo el anonimato.
Por todo ello, son especialmente útiles para realizar compras por Internet o hacer reservas de los principales productos turísticos (paquetes vacacionales, alojamientos hoteleros, alquiler de vehículos, reservas de transportes públicos, entre otros). Para a partir de este instante, utilizarla indefinidamente, disponiendo de otra opción para afrontar los pagos, o complementarla con su tarjeta de crédito habitual.
A la hora de recomendaros tarjetas de crédito os recomendamos estas que os devuelven un porcentaje de las compras realizadas con ellas:
– Tarjeta Avantcard: Te devuelve el 1% de tus compras. Pincha para recibir más información.
– Tarjeta Barclaycard: Te devuelve el 1% de tus compras. Pincha para recibir más información.
– Tarjeta Obsidiana de Bankinter: Te devuelve el 5% de tus compras. Pincha para recibir más información.